Vivo la vida insulsa, engaño a aquel que me intenta engañar ¿Como?
- Haciéndoles creer que soy presa fácil............la verdad....solo busco desconsuelo.
Solo busco desconsuelo, desenfreno, incongruencia, una falsa metodología, palabras delirantes, un revolcón efímero, rasguños extenuantes, miradas divagantes, jadeos extasiantes, días sin horas, horas pasajeras, personas circunstanciales, estrategia bellas falacias, juegos banales......engaños personales!!
Partamos entonces de un supuesto: Escucho a mi viejo maestro profesar, reliquias blasfemar, números incongruentes relatar, espasmos subyacentes, irracionalidad al cuadrado, contundencia disfrazada, un intento de enseñanza, enseñanza que en realidad no me enseña nada. Lo miro dibujar, numeritos al azar, y mientras lo hace, solo pienso en aquel su viejo y guango amigo sin rezar. El abismo entre sus piernas, aquel su nauseabundo problema.
Y lo hago mientras te cito a ti, a mi trozo del momento, a mi cabezón durmiente, a mi victima sucedanea, a mi principe suicida, a mi trofeo del momento.
Llegas un día, presentándote y diciéndome tu nombre, nombre que olvido al instante, mis ojos juzgan con dulzura mirando todas tus cavidades, midiendo tu anchura, mientras me reflejo entre tus ojos, beso tu boca al aire, siento tus manos no tocarme, imagino lo que habría y corto de tajo toda sinfonía.
Abres la boca sin que te lo pida, te escucho empedernida, sin sentido tus palabras le atinan a las mías, te dedico mis momentos, te ganas mi mejor anhelo, me reflejo en tus dilatadas pupilas, admiro tu sonrisa, me siento estúpida. Interrumpes pues mi dormir, te inmiscuyes entre mis sueños, me sacas sonrisas mal fundamentadas, apresuro al tiempo para estar de nuevo contigo jugando con el viento, me siento anestesiada, decido compartirte un camino, desviar este mi delirio, golpear a mi peor enemigo, quitarme el disfraz, para ponerlo en el desván, me detengo un instante!!
Te miro atenuante mientras me incitas a desearte, te odio al instante, te invito a jugar a no engañar, me limito un momento, pierdo la lucidez y el auto-engaño, mi alterego exclama por un beso, estiras tus brazos mientras me hundo en ellos. Doy un brinco y me exalto, tras el hormigueo alterable ¿Quien eres? y ¿Que haces?, ¿Es en serio o te haces?
Le apuesto a mi miedo, retando a mi angustia y ego, hago las pases con la señora imprudencia, le regreso respeto a la peor puta del metro, la ingratitud sale hoy de aquel anexo, me aprietas un seno, mientras yo imagino el resto.....
Arriesgo tu miedo mientras le abro las piernas a aquel mi acertado sendero, escupes blasfemias que engañan al momento, me mientes pensando que todo esto es bien cierto. Le apuestas a tu mierda, a este mi mejor juego, lo vives y te ríes, de este, tu más preciado momento, subestimas al tiempo, aquel tiempo que te da la espalda, lo timas y ahora ve tu el resto....
Un día como estos, te das el lujo de entrometerte en mi vida, egoísta, hedonista, tan imbécil, tan falso e inconsciente, te engañas y me engaño contigo, contigo y todo el resto. Me invitas un día a caminar por un riachuelo, lo tomas y piensas que es muy tontuelo. Intentamos engañar al señor tiempo, nos ponemos una venda y le bailamos a la señora ciencia, mientras tanto, yo muerdo muy bien el anzuelo, me gusta y lo acepto, pero no decido yo el resto.
Me enamoro enseguida de esa tu lánguida persona, me aprendo tu esencia y cada derrota, me como tus miedos, ignorando tus peores defectos, idealizo idealista a esa tu asquerosa sonrisa.
Reconozco tu risa, me aprendo toda tu mímica, adolezco tus caricias, mientras me pierdo y tu me pillas, prometes promesas que ni siquiera quiero, imaginas un cuento sin incluirme en el texto, decides salir del hoyo hundiéndome a mi en el lodo, te olvidas del reto para superarte a ti con todo y el juego.
Un día como este y como los que vendrán, amanezco contigo a un lado, el calor de tu cuerpo me incita a abrazarte, desconozco tu hermosura pero ya jugamos con la señora lujuria. Te miro dormir explayante, escucho aquellos amigables arranques, intento adivinar si es un sueño el que invade tu mente, recorro tu cuerpo como la mejor amante, me hundo un instante en un aniquilante mensaje, mi mente baja la guardia, pues ya no queda más que brindarte, mi cuerpo maltrecho ya esta satisfecho, lo has besado, incitado, lo cansaste hasta saciarte.
Pasan mil horas y todo regresa a aquel instante, donde nuestros ojos se abren, nos miramos vulnerables, pensamos delirantes que todo es por un instante, a mi me gusta tan solo mirarte.
Me besas la frente mientras me abrazas tan fuerte, mis pies rozan los tuyos, me siento insignificante.
SE PIERDE EL CONTROL
Temerosos al instante, platicamos divagantes, penosos por la escena, decidimos romper el esquema. Desperdiciamos todo el día, pensando que nada cuenta, escupo palabras para poder enamorar más a tu alma, mil besos, cientos de abrazos..
¡Bendita farsa!
Regresas a tu inicial destino, un camino, una distancia, ayer contigo, hoy....decido soñar contigo. La distancia hace el primer jaque mate, el señor tiempo cobra ya con arbitraje, fantasmas que regresas con miedo a ahorgase, ¿Y tú? Pobre alma, tan carente de toda posible esperanza.
Lo olvidas todo, como si fuera tan solo un mal brebaje.
Sigues tu vida, como antes de encontrarme. Taciturno y divagante pero ahora juegas a no engañarte
Mientras yo!!! Empiezo con el proceso de aprendizaje!!
Aprendizaje.........JHA... que puedes tu enseñarme, enseñarme a no engañarme, denigrarme, emocionarme?, quizá a ser tan explayante, quizá a desquiciarte, me enseñas a jugar con desatino, a odiar más a la señora sin sentido, a recordar que no hay fé, que no sabes ni siquiera hacia donde mirar, que vacíos todos están, que Eros esquizofrenico está, que Cupido ya no pudo aguantar más, que solo abriste las piernas para que yo pudiera entrar, que tu peor miedo no lo puedes olvidar, que ni siquiera te puedes engañar, que otro tonto macho eres ya!!
Por que tu piensas en una más, pues yo te digo, tu para mi uno menos siempre serás
Engañame para pensar que te engaño, hazme sentir triste de nuevo tan solo un rato, rompe todo aquello que imagine como un juego ingrato, rompe el pedestal donde te subí y tu solo te bajaste, para poder dibujar muéstrame tu espalda, para poderte olvidar y abre bien la boca para creerte una vez más.
Engañame para pensar que yo te engaño, para saber que todo esto era un sueño ingrato, un instante, un recuerdo anesteciante, intente adularte y tu solo me incitaste a matarme.
Engañame para pensar que yo te engaño, que el tiempo no es un tonto adicto al tacto, para entonces adular toda necedad, que no eras ni serás toda aquella bondad.
Engañame para pensar que podemos delirar, pensando que pensamos, fingiendo tan solo un rato.
Los días sin mi
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