
Algunas o
quizá muchas veces la gente se ha cansado de no ser dueño ni siquiera de su
propia vida, de tener que trabajar para alguien, levantarse temprano para irle
a currar a la señora vida, traer el pan a casa, pagar servicios, costear sus
vicios, dormirse temprano para mañana volver a hacer todo lo que ayer, antier y
hoy hizo. Gente enojada con sus sistemas de gobierno, con aquellos explotadores
que explotan sus vidas, con los grandes monopolios que se hinchan las carteras
pero no las suyas, con aquellos avances tecnológicos que jamás podrán comprar,
con aquellas personas ricas que no voltean a ver a los necesitados, hacia
aquellas pequeñas bondades de la vida que pareciera ser que ya todos han
olvidado, con aquel Dios que alguna ves dijo “Amad al prójimo” y ahora ni
siquiera saben que significa estar sentado con el de a lado. En estos tiempos
taciturnos donde la serie de “The Walking Dead” ha traspasado la pantalla, los
encontramos en las calles, en el metro, en los centros comerciales y quizá
dentro de nuestras propias casas, gentes tristes e iracundas pensando que el mañana será más
venidero pero resulta ser que se torna cada vez más catastrófico.
Estaría de más
intentar hacer un recuento histórico y buscar el origen del movimiento
punk, buscar cuando encontraron el
hartazgo y se levantaron en busca de aquel “El Dorado”, hartos estamos todos de
escuchar día a día que el capitalismo esta en crisis, que el neoliberalismo nos
dio en la madre, que el TLC no nos ayudó en nada, que la gente cada día se
sienta sobre sus miserias y que la globalización hace que el mundo sea de todos
y que nada sea de nadie, que vivamos en un constate mundo virtual en el cual el
verde nunca desaparece y allá afuera todo se convierte en una selva de asfalto
y que el miedo siempre salga a flote. Zygmunt Bauman alguna vez le dijo al
mundo “Lo malo es que, además de la inseguridad, es posible que también
desaparezcan las calles las principales atracciones de la vida urbana, como la
espontaneidad, la flexibilidad, la capacidad para sorprender y ofrecer
aventura. El sustituto de la inseguridad no es el éxtasis de la calma, sino la
maldición del aburrimiento.”
Y aquel
aburrimiento se convirtió en una nueva forma de vida, la duda ante ello es:
¿Qué circunstancias o escenarios necesita una persona vivir para rechazar
aquellas convenciones sociales que la gente ha aceptado como una buena forma de
vida y pasar por encima de ellas?
A mediados del
siglo XVIII en plena Revolución Industrial, aquellos trabajadores explotados de
fábricas, cansados de no poder aspirar a
una vida justa e igualitaria como la de la clase burguesa, empiezan a construir
bases ideológicas cimentadas en un bien
común que los sacara de aquella explotación y se pudieran asumir como personas
con derechos y necesidades, inconformes de su situación crean una conciencia de
clase donde se asumen como actores que son necesarios para que aquel engranaje
pudiera simplemente funcionar, con el paso del tiempo y caminando junto al
devenir del progreso se suman a la transformación de la vida misma y no es sino
hasta finales de los años setenta donde el punk empieza a tener sus bases como
movimiento social ya independiente y con las características que hoy en día
siguen intentar seguir vigentes. Al hablar de un punk ¿Que es lo primero que se
nos viene a la mente?, personas desalineadas con perforaciones en el cuerpo,
cabellos pintados, ropa con consignas de protesta, botas como si siguieran
siendo obreros, drogadictos, vagos, simplemente es la negación del cuerpo del
tercero, Araceli González en su articulo “Michel Foucault, Judith Butler y los
cuerpos e identidades críticas, subversivas y reconstructivas de la
Intersexualidad” retoma el concepto de Foucault “cuerpos dóciles” refiriéndose
a estos, como cuerpos sometidos, moldeados por el poder disciplinario, cuerpos
que pueden ser manipulados, que se les puede dar forma, ser educados y sobre todo que obedecen, todo
aquello que el punk había deicidio negar, rompió paradigmas y decidió llevarlo
al plano cotidiano con un nuevo lenguaje en el cuerpo, lenguaje que transgredía
con todo lo que la sociedad había establecido como aceptable, ante ello formulo
la siguiente pregunta ¿Qué es lo que busca representar un cuerpo que
transgrede?, inconformidad en su más grande esplendor, al romper los limites y
llevarlos al plano del cuerpo se crea una nueva forma de ser mirados,
formularon una especie de autoexclusión por no querer ser como la masa era,
llevar la protesta social desde el cabello, llevar la lucha levantándose la
cresta, ¿Que es lo que obtuvieron? Ser reconocidos como el conflicto, una
discriminación por no seguir los convenios sociales, cundir un miedo ante lo
desconocido y la exclusión que quizá ellos mismos gritaban.
Y si bien es
cierto, la vida misma no espera aceptaciones ni procesos, se necesita ser un
actor productivo o sino simplemente te deshecha ¿Qué intentaron construir? Alternativas,
formas de emplearse autogestivamente, una nueva forma de gobierno, es decir,
una sociedad políticamente organizada sin Estado, la tan desprestigiada “Anarquía”
hoy en día, el sueño de algunos, la utopía para otros y el caos para muchos,
reforzando valores como libertad, igualdad, equidad, solidaridad y mutualismo.
Significaciones tergiversadas
“Muchos
anarquistas y luchadores sociales prefieren mantenerse anónimos al emitir sus
frases, pues es una manera de hacerlas todos y para todos, es sembrar una
semilla en el otro para hacer crecer la ideología anarquista, por que ser
anarquista va más allá de una cresta y estilo de vestir, va más allá de un
cierto tipo de música. Ser anarquista es tratar de ser no solo diferente sino
mejor, es estudiar día a día para tener los argumentos suficientes para
combatir al sistema, es hacer lo necesario sin afectar al otro, es cambiar uno
y cambiar al mundo, es luchar e invitar a la lucha, es soñar y construir, es
caminar de la mano del otro y compartir no solo cosas materiales o comida sino
ideas sueños y esperanza.” (Anónimo)
Muchos
cuestionan el significado del outfit
del punk, pero, ¿Qué significa? Me resulta irónico buscarle una significación
al por qué de tantas cosas, sería como hacer un sondeo y preguntarle a la gente
¿Por que consume más Colgate y no Crest?, ¿Por que utilizan corbatas si les
oprime el cuello? ¿Por qué utilizan Zara y no Channel?, ¿Por qué utilizan
tacones si les lastiman los pies? todo es subjetivo. Partamos entonces de que
no existe una generalización, pero si una intención y ésta es buscar el
reconocimiento en la diferencia; la cresta, es el corte de cabello más característico del
punk, proviene de una tribu de la costa oeste de Estados Unidos, llamada los
Mohicanos, que vivían sin jerarquías y en igualdad; afeitando la mayoría de la
cabeza a excepción de una franja de pelo en el centro del cráneo; A mediados de
los años setentas se empiezan a teñir la cresta de diversos colores,
añadiéndole más rebeldía hacia el rechazo de aquellas modas seguidas por las
masas, los estoperoles son accesorios de metal utilizados principalmente para
adornar la ropa, se utilizaron como una manera de burlarse de la Reina de
Inglaterra en los años setenta, cuando salía a saludar al pueblo desde su balcón
adornada de sus mejores joyas ante aquel pueblo miserable, los punks también
querían brillar, “Si la reina brilla, nosotros también” y desde entonces se ha
convertido en parte esencial en la vestimenta, los parches en la ropa son
mensajes políticos ante las inconformidades del sistema ¿La razón principal?,
ser leídos por la gente e intentar crear consciencia. La utilización de las
botas es plasmar la inmortalidad del movimiento obrero, seguir bajo aquella
conciencia de clase intentando buscar una igualdad ante todo y todos.
Algunos
consideran al movimiento punk como una cultura, entendiendo a “la cultura o
civilización, en sentido etnográfico amplio, es aquel todo complejo que incluye
el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y
cualesquiera hábitos y capacidades adquiridos por el hombre en cuanto miembro
de la sociedad…Por una parte, la uniformidad que en tan gran medida caracteriza
a la civilización debe atribuirse, en buena parte, a la acción uniforme de
causas uniformes; mientras que, por otra parte, sus distintos grados deben
considerarse etapas de desarrollo o evolución, siendo cada una el resultado de
la historia anterior y colaborando con su aportación con la conformación de la
historia del futuro.”(Ariño, 1997, p.27) Futuro que todos buscamos construir en
armonía, excluyendo a aquellos que no son funcionales en el anclaje,
excluyéndose algunos por no sentirse parte.
“Hacemos la declaración de que no hay otra nobleza
que la de la virtud, del saber; Que todos somos iguales, pues del mismo origen
procedemos, que no haya privilegios no abolengos, por que no es racional ni
humano ni debido que haya esclavos, pues el color de la piel no cambia el del
corazón ni el del pensamiento”.
(Anónimo)
Posmodernidad, neo-modernidad o tiempos violentos
En estos
tiempos tan abruptos, donde nada es para siempre, y el siempre se convierte a
corto plazo, “la idea de identidad nació de la crisis permanente del esfuerzo
que desencadenó para salvar el abismo existente entre el “debería” y el “es”,
para elevar la realidad a los modelos establecidos, para rehacer la realidad a
imagen y semejanza de la idea” (Bauman, 2005, p49), el punk se apegó al
proyecto de vivir bajo la lógica de aquella realidad de la que ellos eran parte
y la construían bajo el ideal de “Hazlo tu mismo” autogestivamente, pero pronto
la vida misma se vio consumida por la Industria Cultural, aquella que se
apoderó de casi todos los medios de producción de las cosas existentes para
venderlos en presentación para llevar y así la gente fue excluida de los
procesos productivos, ¿Quién produce la comida que se lleva a la boca? ¿Quién
busca cubrir su cuerpo construyendo sus ornamentos? ¿Quién trabaja con las
herramientas que ellos mismos construyeron? ¿Quién vive sin dinero? y así ellos
mismos se perdieron.
Nos
convertimos todos en mercancías consumiendo mercancías, la tan amada
autogestión se quedo atrapada por el sistema, a pesar de buscar formas y alternativas
que no solo el punk buscaba, se crearon formas informales como medios de
subsistencia, creando nuevos empleos, ocupando nuevos espacios, construyendo un
nuevo mercado, buscando saciar necesidades que el sistema no les daba; 6 de
cada 10 mexicanos trabajan en el sector informal (http://www.jornada.unam.mx/2012/12/12/economia/027n1eco,
consultada el 30 de noviembre 2013, 22:00 hrs.), como consecuencia de un
gobierno que no es capaz de cubrir las necesidades básicas de la población .
En la sociedad
humana, ningún objeto o cosa tiene existencia ni movimiento, salvo por el
significado que los hombres pueden asignarle (Ariño, 1997, p.40) pronto esta
forma de resistencia se convirtió en anclaje fundamental del sistema, todo se convierte en un círculo vicioso donde
aquel que intenta buscarle una ventaja se ve de pronto devorado por otras
clemencias. El punk buscó una manera de darle cara a la vida, buscar una
solución ante el problema que se le imponía, encontró una alternativa
gestionándola desde sus fronteras, pero he ahí la incongruencia, el capitalismo
está en todas las esquinas, los monopolios se han adueñado de todas las
vitrinas, los tintes los venden los mayoristas, los estoperoles en bellas
mercerías, las botas del tan afamado Dr. Martens, la comida quizá en algún
tianguis por comodidad, un Wal-mart o con el tío Chedrahui, los vicios hasta la
Victoria siempre, sin perderse ante
la Modelo especial consumiendo
siempre un buen y cotizado Delicado
transportándose a las arenas con un buen Camel.
Si la conducta humana no estuviera gobernada por estructuras culturales, sería
virtualmente ingobernable, serían puro caos de actos sin finalidad y de
estallidos sin emociones, de suerte que sus experiencias serían virtualmente
amorfas.(Bauman, 2005, p. 33).
Valeria, 24
años, una chica enojada con el sistema, estudiante de la Universidad Autónoma
Metropolitana, vendedora ambulante de molletes y sincronizadas dentro del
Plantel Xochimilco, sin tiempo para alistarse al ejercito activo del trabajo
formal, busca costearse sus necesidades y estudios encontrando un espacio informal
dentro de su universidad, amada por algunos, mal vista por otros, gana
aproximadamente $800.00 diarios en un horario de 10 de la mañana a 2 de la
tarde saciando el hambre de algunos compañeros de clase, obteniendo el salario
que algunos ganan en una semana laboral, la autogestión sale a flote,
encontrándole la alternativa a su desfavorable
trote, le pregunto a ella ¿Qué es lo que
hace con aquel buen forraje? Pagar renta, luz, agua, transporte, comida, copias
de la Universidad y alguno que otro derroche.
“Estas
escenificaciones con toda su estela de miseria humana, tragedia y muerte,
demuestran que vivimos en medio de un régimen de violencia forzada que no es
necesariamente física, ya que básicamente es emocional. Es profiláctica,
preventiva, ejemplar o regulatoria dependiendo de los reforzamientos mediáticos
en boga con el propósito de generar conductas que consiguen adaptar a “los
ciudadanos sin atributos” a una disciplina social apolítica con el fin de que
declinen a sus derechos para dar lugar a una autorregulación que raya en la
felicidad paradójica del individualismo tedioso. “(Gaytán, 2013, p 167)
Intentando
sobrevivir con la maldición que decidieron cargar sobre su espalda, el punk
buscará siempre encontrar alternativas ante aquellos obstáculos que frenen la
igualdad y la equidad, sería totalmente pesimista negar todo intento y muestra
de resistencia, aplaudir a aquellos minúsculos éxitos ante la barbarie, echarle
agua al granito de sal que ellos han solidificado y pensar que el capitalismo
se ha convertido ahora en su estandarte, pero si bien es cierto, la mentalidad
ha evolucionado como la vida misma y el estilo de vida ha encontrado nuevas
formas de subsistencia.
“Comerciantes venden pobreza y tú metido en tu
aburrimiento. Los Estados sangran el cuerpo de la tierra y tú recoges tus
trozos de tu última borrachera fiestera. Maderos se inventan juegos nuevos
nocturnos sobre las cenizas del tercer mundo. La misma ceniza cubrirá la misma
sangre, tus pesadillas vomitarán tus propios sueños. Me llamas vagabundo,
caótico, sectario, hago lo que puedo, esperándote al mismo tiempo. Tú decide lo
que te convine mejor pero no digas que no sabías”.
Ojrá
Sìrojéti, Atenas 2005
Nuevas formas de resistencia
En este mundo
mediático, con el auge de los mass media, de los avances tecnológicos, el boom
de las redes sociales, las bases de las
relaciones sociales han llegado a una nueva dimensión, “el que no esta
conectado ,esta fuera”.
A mediados de
los años noventas los medios de comunicación sufrieron estragos por parte del
progreso tecnológico, el punk que por los años ochentas, por medio de fanzines,
que eran una especie de publicaciones con contenido social, expresaban
sentimientos, anhelos, hablaban del movimiento punk, sobre el anarquismo,
desempleo, la situación económica y política del país, proponían alternativas
impresas en fotocopias a blanco y negro, buscando difundir la ideología en
manera de sus posibilidades, con el avance rapaz del tiempo, los libros fueron
desplazados y presentados en versión digital, el Internet se constituyó como la
Enciclopedia más grande y gratuita, el e-mail remplazo a las cartas, el
teléfono al telégrafo y la televisión al periódico, las formas convencionales
se modernizaron y con dicha modernización igual el punk. Algunos piensan que es
una incongruencia que el movimiento punk utilice ciertos medios masivos si va
en contra de su ideología, aquella que dice ir en “contra del sistema”, pero
¿Qué significa realmente ir en contra? ¿Ser parte de la dinámica social establecida?
o ¿Utilizarla como una nueva herramienta de contraprotesta?
Si bien es
cierto la ruptura generacional desde los años ochentas se ha visto marcada por
los avances de comunicación en donde el avance tecnológico se ha hecho parte
del día a día de los actores sociales….. ¿Quién no tiene un celular? ¿Quién no
utiliza el Internet? ¿Quién no mira la televisión?, el punto incisivo es ¿Para
que se utiliza realmente? No es un pecado capital que la gente guste de
adornarse de avances tecnológicos materiales, tener un celular con Internet de
banda ancha, que tengan las mejores aplicaciones (Facebook, Twitter, Whatsapp),
una televisión de plasma de 20 pulgadas, una computadora Mac, una Tablet, un
Ipod, infinidad de cosas que la gente hoy en día puede consumir y poner en
práctica su libre albedrío, bajo la misma lógica el punk los utiliza, sin otra función más que la de
ser “un dispositivo que desplaza el libre uso de los hombres a una esfera
separada, en la cual se convierte en derecho….hoy los consumidores en las sociedades
de masa son infelices, no es sólo por que consumen objetos que han incorporado
su propia imposibilidad de ser usados, sino también –y sobre todo- porque creen
ejercer su derecho de propiedad sobre ellos, por que se han vuelto incapaces de
profanarlos” (Agamben, 2005, p107-108) y es ante ello la discusión, ¿Cuáles han
sido los cambios en las relaciones sociales a partir del consumo de dichas
tecnologías de comunicación? Enajenación y alienación en la gente, que ha sido
subsumida por el uso exacerbado de dichos aparatos, donde la realidad se ha
convertido en la virtualidad que es ofrecida por cada uno de ellos, donde estar
conectado es estar vivo, el publicar estados de ánimo los hace sentir queridos,
mandar mensajes de texto en vez de una plática en vivo, compartir imágenes para
sentirse incluido, “El espectáculo es el capital en un grado tal de acumulación
que se ha convertido en imagen…inmensa acumulación de espectáculos en la que
todo era directamente vivido se aleja en una representación”. (Brzezinski,
2004, p 35)
Al hablar del
tan utilizado Facebook, la red social más innovadora de todos los tiempos,
donde 1060 millones de personas en el mundo hacen uso de esta red social (http://www.merca20.com/facebook-2013-1060-millones-de-usuarios/, consultada el 2 de diciembre 2013, 18:30
hrs.), está al alcance de muchas personas por medio de diversos aparatos
tecnológicos que cuentan con su aplicación (celulares, computadoras, tablets,
televisiones, Ipods, consolas de juego como Xbox, PlayStation, etc.) están
conectados 24/7 desde cualquier parte del mundo, compartiendo con él, lo que
estos quieran, se ha convertido en el diario de algunos, el chismógrafo de
otros, el confidente, el amigo, el rompe corazones, el reencuentro de amigos de
la infancia y una nueva forma de organización social, “no es sólo una herramienta;
es al mismo tiempo tecnología, medio y motor de relaciones sociales. No sólo
estructura las relaciones sociales, es el espacio en donde dichas relaciones
ocurren y la herramienta que los individuos usan para entrar en ese espacio. Es
mucho más que el contexto en donde ocurren esas relaciones (aunque eso sea
también). Por ello, es comentado e imaginativamente construido por procesos
simbólicos iniciados y mantenidos por individuos ”(Gómez, p 23), el ejemplo mas
claro es el 15O (15 de octubre del 2011) donde 80 países de los cinco
continentes se unen a las demandas del Movimiento de los Indignados que tuvo
sus inicios en Madrid, España el 15 de mayo del mismo año, para exigir una
¡Democracia Real! (http://www.lavanguardia.com/internacional/20111014/54231085565/indignados-15-o-manifestacion/index.html,
consultada el 2 de diciembre del 2013, 20:00 hrs); el evento se difundió
principalmente por las redes sociales, teniendo un impacto masivo a nivel
global, donde usuarios de dichas redes se sintieron identificados con el movimiento
y empezaron a organizarse por vías de la virtualidad, teniendo un gran impacto
sobre las ciudades de países que presenciaron dichas marchas, el 15O fue un día
de caos mundial, al hablar de las nuevas formas de relaciones sociales sería
equivocado pensar que dichas redes sociales solo degeneran la realidad de los
actores, es decir, “la vida buena ya no está sólo en lo real, o sólo en lo
virtual, sino en la congruencia de los dos, donde uno parece alimentarse del
otro, transformando a ambos, y creando el espacio cibernético que se convierte
en síntesis de ambos” (Ibíd., p.31), en consecuencia todo radica en la finalidad que se les imprima; sería
totalmente pretencioso decir que si bien el punk ha decido ser parte de la
redes sociales, únicamente lo utilicen como una herramienta para buscar nuevas
formas de organización social, seguir bajo la dinámica de la resistencia y
pensar que todos lo utilizan bajo la misma lógica sería irracional; me parece importante hacer énfasis sobre aquellas
organizaciones que han tenido impacto en el país bajo esta nueva forma de
organización social, como son las marchas contra la violencia “No + sangre”,
marchas anti-Peña, la del 1 de diciembre 2012 en contra de la llegada de
Enrique Peña Nieto a la presidencia, el
movimiento #Yosoy132, las protestas que se suscitan actualmente en contra del
alza del boleto de el metro “Brinquémonos el torniquete”, donde se busca ser
participe de la transformación de la sociedad, ser la solución misma ante el
problema, “las batallas culturales son las batallas del poder en la era de la
información. Se libran primordialmente en los medios de comunicación y por los
medios de comunicación, pero éstos no son los productos los que ostentan el
poder. El poder, como capacidad de imponer la conducta, radica en las redes de
intercambio de información y manipulación de los símbolos, que relacionan a los
actores sociales, las instituciones y los movimientos culturales, a través de
íconos, portavoces y amplificadores intelectuales” (Castells, 1998, p. 409)
La Claustrópolis en la Ciudad de México
Se podría
llegar a pensar si ¿El punk puede desarrollar su ideología en un
entorno fuera de la Metrópolis?, si bien
es cierto es que el punk es citadino, surgió en los suburbios para seguir
viviendo en ellos, para poder ir en búsqueda de esa afamada justicia, para
poder hondear aquella bandera de libertad, para buscar en sus hermanos la consciencia
de la igualdad, para construir una sociedad sin Estado.“El espacio no es una
fotocopia de la sociedad; es la sociedad misma” (Castells, 1996, p.444).
En estos
tiempos posmodernos, donde la gente vive con miedo hasta de sus propias
sombras, vivir en sociedad se ha convertido en el reto, en poder vivir con el
de a lado, ayudar al extraño, convivir con el ausente y tolerar al tirano. “En
el pasado, ningún gobierno había tenido el poder de mantener a sus ciudadanos
bajo una vigilancia constantemente. Ahora la Policía del Pensamiento vigilaba
constantemente a todo el mundo“(George
Orwell, 1984, p.85), en el presente siglo XXI, no podemos hablar, que alguien
se escape del mundo urbanizado, nadie es capaz de imaginar su vida sin una
relación directa con la órbita de las ciudades. “La gestión económica,
cultural, social, deportiva…es netamente urbana. Un mundo urbanizado que se
caracteriza por elevadísimas tasas de marginación, de disparidades económicas,
de segregación y tensiones étnicas, de fragmentación y polarización social, de
divisiones sexuales y raciales, de elevadas tasas de violencia y crimen, que
están originando una progresiva desaparición del Estado social a favor de un
Estado policial. Actualmente, en la época de desarrollo de la megalópolis, la
ciudad aparece como el lugar donde se conjugan todos los peligros. Los
ciudadanos perciben que sus ciudades (las grandes y las más pequeñas) son cada
día más inseguras, pero no saben exactamente qué es lo que les produce miedo ni
quienes son con “exactitud”, los culpables o los “agresores” (G. Cortéz, 2010,
p.99) y el punk es parte de ello, los años acumulados por el movimiento
parecieran ser que no han sido los suficientes para obtener una aceptación por
parte de la gente, no me atrevería a asegurar que es desconocimiento de la
sociedad ante aquello que aún pareciera ser incomprensible, sino que “para
sentir miedo no hace falta que exista un peligro “real”, basta con que exista
la percepción de dicho peligro, y lo que para algunas personas puede ser un
elemento de temor, para otras es simplemente un fenómeno más del entorno.”
(Gómez, 21), entonces ¿Cómo convivir con aquel que nos tiene miedo? Buscando no
caer en aquella su tentación, en convertirnos en intolerantes, en haters de la
sociedad, en ermitaños enojados, en antisociales reprimidos. “Cuando las
opiniones irracionales ocupan el lugar de las ideas, la fuerza lo puede todo;
es muy injusto decir, por ejemplo, que el fascismo aniquila el pensamiento
libre, en realidad, la ausencia de pensamiento libre es lo que hace posible
imponer por la fuerza doctrinas oficiales sin sentido” (Simone Weil).
Pues busquemos
todos construir siempre el pensamiento libre, aquel que irradia ante la
justicia, el que clama libertad, el que extermina a los opresiones, el que
busca siempre encontrar solidaridad, el punk encontró asilo, en aquellos
lugares se sentían reconocidos, lugares que eran suyos, lugares que expresaban
su arte, la música se hizo su estandarte, donde “la lengua abdica ante el
lenguaje corporal, la creencia y la intuición; el punk se resiste a la
definición tanto por la forma como por sí mismo.” (Morín, p.101), afectando los
modos simbólicos de aquello que conocemos como realidad colándose en todas las
instancias de la vida social y no es por ello que “los efectos ideológicos de
mayor éxito son aquellos que carecen de palabras y no demandan más que un
silencio cómplice” (Cortés, 2010, p.24), dile a gente que los cuervos ahora comen
niños, y los niños no saldrán a las calles a jugar, muertos de miedo por las
terribles historias que sus heroicas madres les han contado, se esconden bajo
su cama negándose a tomar ningún rayo inhumano. La sociedad consigue, mediante
la creación y difusión de determinados estereotipos y clichés, la sumisión
cultural y docilidad ideológica. (Ibídem, p. 36), creados estos como una forma
de control de la sociedad, darle la oportunidad de decidir como quieren
vestirse ¿Con Zara, Bershka o Pull&Beer?, que quieren consumir, ¿P&G,
Nestlé o una rica y fría Coca? , que quieren escuchar ¿Pop, Reguetton o una
buena Salsa?, como quieren vivir ¿En circuitos cerrados, electrificados, o con
un señor de vigilancia?, como piden seguridad ¿Instalando cámaras, alarma vecinal?
a quien vigilar ¿Al vecino tacaño, al esposo que golpea o a aquel punk que se
mira raro?
Las grandes
urbes se están convirtiendo en una especie de campo de batalla (en el que no se
sabe muy bien quien es el enemigo) en el que se establece una violencia más o
menos soterrada a punto de estallar en cualquier momento. (Ibídem, p.107), la
vigilancia la encontramos en todas partes, en las cámaras instaladas en una
buena esquina, en la tienda de Lupe para poder mirar a los ladrones, en los
centros comerciales por si a alguna buena dama se le ven los chones, en las
Iglesias pa´ poder contar bien los montones, en bancos para poder identificar a
los bribones y en las Universidades pa´ mirar que los muchachos, entren bien
contentos a sus respectivas clases, el panóptico ha llegado para imponerse ,
donde las calles, los edificios, las luces, se conjugan en un constante
control, donde ahora es: “Todos contra todos.” Nos tenemos miedo los unos a los
otros, miedo a lo que nos gusta, miedo a lo que es diferente, miedo hacia
aquello que es en masa y corroe, miedo al hedonismo irrefutable, miedo a lo
normal y a los anormales, miedo a lo que trasgrede, miedo a la rebeldía, miedo
a la justicia, a la democracia y a la libertad.